La UCAM publica un artículo en una de las 10 mejores revistas en nutrición y dietética
Esta investigación llegó a la conclusión de que la adicción a la comida influye en los patrones de consumo de personas con exceso de peso corporal y en el desarrollo de la obesidad.
El 8% de la población mundial es actualmente adicta a la comida. Las personas con adicción a la comida sufren repetidos intentos fallidos de reducir su ingesta de alimentos y no pueden abstenerse de ciertos tipos de alimentos o reducir el consumo a pesar de las consecuencias negativas relacionadas con la obesidad y los trastornos alimentarios. Se trata de alimentos altamente procesados, que pueden compartir características con las drogas de abuso (p. ej., tolerancia, abstinencia) y podrían dificultar especialmente la adopción de hábitos alimentarios más saludables La adicción a la comida se ha visto en la sociedad como un problema de salud pública, pero un estudio realizado por el plan propio de investigación de la UCAM ha llegado a la conclusión de que hay personas adictas a la comida que desarrollan sobrepeso y otras que mantienen un peso normal.
Por un lado, este descubrimiento indica que la adicción a la comida no está asociada a aumentar la cantidad de alimentos ingeridos a lo largo del día, en la población general. Por otro lado, se observó que, entre personas con obesidad o sobrepeso, la adicción condiciona la cantidad de alimentos diarios, favoreciendo a aumentar más su peso. Diferencias que pueden deberse a la realización de conductas compensatorias de riesgo u otras.
Tras publicar su artículo en la prestigiosa revista de Clinical Nutrition, top 10 mundial en nutrición y dietética, los investigadores de Enfermería de la UCAM, Juan José Hernández y Cristina Reche, ya se encuentran estudiando los posibles condicionantes en el funcionamiento cognitivo que se producen entre los adictos a la comida con los dos pesos para llegar a conocer cómo pueden controlar la ingesta de comidas las personas que tienen pesos normales y caracterizar los grupos.
Esta colaboración se ha realizado entre la Facultad de Enfermería de la UCAM, el Instituto Nacional de Investigación en Salud y Cuidados de Oxford, la Universidad de Alicante y la Universidad de Granada